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Cañada de Gómez: Mariano Aguilar, a los 56 años, volvió a jugar al básquetbol
Se calzó los pantalones cortos para jugar el certamen local de Cañada de Gómez con ADEO. Sus sensaciones en esta vuelta a las canchas por el Torneo de Mayores.
Viejo es el viento, pero aún sigue soplando…
El personaje, si, o protagonista, también, de la presente cobertura periodística es el “Pato”, para los campanenses, el “Tigre” para el ambiente basquetbolístico de la Liga Nacional.
A sus 56 años, el histórico basquetbolista campanense se calzó los pantalones cortos para jugar el certamen local de Mayores de Cañada de Gómez con ADEO (Asociación Deportiva Everton Olimpia).
“Yo vivo enfrente de ADEO, club de los Brussino y Mainoldi (NdR: jugadores de LNB y Selección). En plena pandemia, con todo cerrado, me invitaron a entrenar y empecé con la primera. Vale aclarar que nunca dejé de entrenar y jugar, donde voy como entrenador entreno y juego con los maxi del lugar que me contrata. Entrené hasta que un día el entrenador me preguntó si quería jugar el torneo local. Fue muy sorpresivo e inesperado”, expresó Mariano a los colegas de Básquet Plus.
Para agregar: “Yo esperando que me llamen para dirigir (NdR: había terminado con Zárate Basket) y me llaman para jugar. En fin, empecé, seguí, me esforcé y lo tomé con mucha responsabilidad, seriedad y compromiso”.
¿Cómo será el momento? Aguilar jugó 25 años a nivel profesional y expresó: “Lo vivo con la alegría e ilusión de un jugador de 17 años que lo citan para primera. Lo vivo como cuando me llamó Augusto Pastore para ir a Independiente de Zárate o cuando León Najnudel me llamó para ir a Sport de Cañada de Gómez”.
Por último, cuando le preguntaron sobre sus objetivos, respondió: “Son muy simples, dar el 102% en cada acción defensiva u ofensiva, ser respetuoso por el básquet, por el entrenador y mis compañeros y, lo más importante, ser respetuoso del club al que represento. Siempre tratando de hacer lo mejor que se y lo que no me sale mejorarlo en los entrenamientos, en el día a día, esas son las metas de inmediato. En el corto plazo queremos tratar de llegar a las finales con este equipo de pibes extraordinarios, de buena madera, con un entrenador simple, honesto y práctico, y con mi familia en la platea. A largo plazo, espero tener la chance de volver a dirigir en Liga”.
El personaje, si, o protagonista, también, de la presente cobertura periodística es el “Pato”, para los campanenses, el “Tigre” para el ambiente basquetbolístico de la Liga Nacional.
A sus 56 años, el histórico basquetbolista campanense se calzó los pantalones cortos para jugar el certamen local de Mayores de Cañada de Gómez con ADEO (Asociación Deportiva Everton Olimpia).
“Yo vivo enfrente de ADEO, club de los Brussino y Mainoldi (NdR: jugadores de LNB y Selección). En plena pandemia, con todo cerrado, me invitaron a entrenar y empecé con la primera. Vale aclarar que nunca dejé de entrenar y jugar, donde voy como entrenador entreno y juego con los maxi del lugar que me contrata. Entrené hasta que un día el entrenador me preguntó si quería jugar el torneo local. Fue muy sorpresivo e inesperado”, expresó Mariano a los colegas de Básquet Plus.
Para agregar: “Yo esperando que me llamen para dirigir (NdR: había terminado con Zárate Basket) y me llaman para jugar. En fin, empecé, seguí, me esforcé y lo tomé con mucha responsabilidad, seriedad y compromiso”.
¿Cómo será el momento? Aguilar jugó 25 años a nivel profesional y expresó: “Lo vivo con la alegría e ilusión de un jugador de 17 años que lo citan para primera. Lo vivo como cuando me llamó Augusto Pastore para ir a Independiente de Zárate o cuando León Najnudel me llamó para ir a Sport de Cañada de Gómez”.
Por último, cuando le preguntaron sobre sus objetivos, respondió: “Son muy simples, dar el 102% en cada acción defensiva u ofensiva, ser respetuoso por el básquet, por el entrenador y mis compañeros y, lo más importante, ser respetuoso del club al que represento. Siempre tratando de hacer lo mejor que se y lo que no me sale mejorarlo en los entrenamientos, en el día a día, esas son las metas de inmediato. En el corto plazo queremos tratar de llegar a las finales con este equipo de pibes extraordinarios, de buena madera, con un entrenador simple, honesto y práctico, y con mi familia en la platea. A largo plazo, espero tener la chance de volver a dirigir en Liga”.
